El rubor de maquillaje, también conocido como colorete o blush, es un cosmético esencial para dar vida y dimensión al rostro. Su función principal es simular el rubor natural que aparece en las mejillas cuando nos sonrojamos, aportando un toque de color saludable y juvenil.
Además, el rubor ayuda a esculpir el rostro, definir los pómulos y crear un equilibrio visual con el resto del maquillaje. Usado de la manera correcta, el rubor puede transformar por completo tu apariencia, dándote un aspecto fresco, descansado y radiante.